Tengo la leve sospecha, de que tu amargura busca emparejarme a su nivel.
Por eso te aclaro: yo fui muy infeliz antes, cuando vos tenías bonanza. No es justo que tu deseo torcido quiera bajarme ahora de la calesita.
No está bien que la amargura por episodios de tu vida me pegue cachetazos, yo no tengo la culpa de ninguna de tus desdichas.
Y aún ahora, -serenamente feliz- ¡tengo tantos problemas! Problemas con los que vos no podrías vivir ni una semana. Pero yo no te paso factura de mis pobrezas, no tiene nada que ver.
28.8.06
amistad
Grushenka lo dijo a las 11:16 a.m.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentarios:
si te dieras una idea lo mucho que entiendo el último párrafo del post te caerías de culo ....
un beso grande
Publicar un comentario