la quinta parte de la verdad

el hombre habla con su amante,
quiere saber si ha tomado valor
para decirle a su padre
que esa noche de fin de año
no tendrá hijo en casa, sino
viendo explotar colores
en una quinta lejana

Pero el muchacho no ha tomado valor
y luego del brindis
pedirá el auto prestado
para ir a saludar a su novia
que pasa las fiestas
en una quinta lejana

vegetal

partir el cactus y derramarse en agua
enverdecer para tragarse el sol
sangrar a pinchazos
la savia blanca

volatilizarse y escapar
de la flor

oscuridad

entre la maleza
jungla espesa
hojas anchas y verde gruesas
aroma a todos los vientos de lluvia
humedad
y se vislumbra desde lejos
en la muy noche
la brasa de un cigarrillo
que se ilumina al pitar

estático

esperando el zarpazo
las garras hundiéndose en la carne,
el momento exacto en que la penetran
la ruptura de la piel ya no tan elástica
y la sangre que fluye a borbotones,
cálida
y espesa

portarse bien

-¿te vas a portar bien?
-¡sí!
-(¡qué lástima!)

té frío

2 botellas almacenadas de placer instantáneo
y yo con dolor de garganta reincidente



Así es la vida

abc

El tiempo se detiene entre el café con leche y el baño.
Tuve una idea sensacional: sobre clases de personas y el tiempo que se detiene.
Eran personas de café con leche?
Eran personas que hacían el trabajo en el laverrap?

Una excelente idea perdida.

Era una idea sobre que no somos todo el tiempo aquello que hacemos o que pensamos. Nuestro yo se expande más allá del café con leche matinal, doblar la ropa limpia, prender sahumerios y apretar el botón del baño.

Pero qué pasaría si...

ahhhh, aquella era la hermosa idea...